El impacto del calzado en la salud postural: Más allá de la tendencia.
Al concebir el calzado, lo primero que nos asalta la mente es tendencia, estética y ocasión. Pero el tipo de calzado que vestimos en nuestro día a día afecta directamente a nuestra salud postural y a la forma en la que se encuentra el equilibrio en nuestro cuerpo; se utiliza para prevenir lesiones. El presente artículo procura averiguar de qué modo afecta el tipo de zapatos que utilizamos a nuestra salud postural, y cómo se ve afectada la salud física; y las razones que conducen a que la elección del calzado adecuado no debe desestimarse por poco importante, más bien al contrario.
La conexión entre el pie y la postura
Los pies constituyen la base del ser humano y cuando su estado es erróneo, se traduce en problemas de las rodillas, caderas, columna cervical, e incluso el cuello, y usar un mal calzado puede producir malas posturas, dolores musculares, cansancio o esguinces o lesiones si tenemos en cuenta que una mala postura que da el calzado provoca un estado del cuerpo que es inadecuado e incómodo.
Tipología de los calzados que afectan la postura.
Tacones altos: Elevan el talón y alteran el centro de gravedad. Esto obliga a las caderas y la espalda baja a compensar, causando tensión muscular.
Zapatillas planas sin soporte: Aunque cómodas, si no tienen soporte adecuado para el arco del pie, pueden provocar fascitis plantar y dolor lumbar.
Zapatos demasiado ajustados: Pueden alterar la forma natural del pie y causar juanetes o dedos en martillo.
Los zapatos de deporte erróneos: cada actividad requiere un soporte determinado, ya que el uso de otro tipo de bota (por ejemplo, zapatillas para correr en una sesión de entrenamiento de fuerza) puede conllevar una mayor probabilidad de lesiones.
Señales para detectar que los zapatos te perjudican.
Dolor frecuente en la espalda o rodillas
Cansancio al caminar distancias cortas
Callos o ampollas recurrentes
Cambios en la forma de caminar o cojera
Consejos para elegir el calzado correcto
Opta por modelos con soporte para el arco y buena amortiguación
Asegúrate de que haya espacio suficiente en la puntera
Considera plantillas ortopédicas si tienes pies planos o muy arqueados
Cambia el calzado deportivo cada 600 a 800 km de uso
Tendencias saludables en la industria del calzado
Hoy en día, marcas como Birkenstock, Asics, New Balance y otras han incorporado diseños ergonómicos que combinan estética y funcionalidad. También hay un auge en el calzado minimalista que promueve el movimiento natural del pie, ideal para fortalecer los músculos plantares.
Conclusión
Más allá del diseño y la marca, el calzado debe ser una herramienta para cuidar nuestra salud. Elegir los zapatos correctos es una inversión en bienestar a largo plazo. Así que, la próxima vez que vayas de compras, pregúntate: ¿estos zapatos solo se ven bien, o también me hacen bien?